Las empanadillas de jamón y queso fritas son un bocado irresistible, un clásico de la cocina española que conquista a grandes y pequeños. Su crujiente exterior y su cremoso relleno las convierten en la opción perfecta para una cena rápida, un aperitivo con amigos o incluso un picnic. Esta receta es sencilla y adaptable, permitiéndote personalizarla a tu gusto con diferentes tipos de queso, jamón y especias. Prepárate para disfrutar de una explosión de sabor en cada mordisco.
Ingredientes (para aproximadamente 12 empanadillas)
- 12 obleas para empanadillas (pueden ser frescas o congeladas)
- 200 gramos de jamón cocido o serrano, cortado en dados pequeños
- 200 gramos de queso (ver opciones más abajo), rallado o en dados pequeños
- 1 huevo batido (para pintar las empanadillas)
- Aceite de oliva o girasol para freír
Opciones de Queso:
- Queso Gruyere: Aporta un sabor intenso y un toque ligeramente a nuez.
- Queso Emmental: Similar al Gruyere, pero con un sabor más suave.
- Queso Cheddar: Ofrece un sabor más fuerte y un color anaranjado característico.
- Queso Mozzarella: Proporciona una textura muy cremosa y un sabor delicado.
- Queso Manchego: Un queso español con un sabor pronunciado y ligeramente ácido.
- Mezcla de quesos: Combina diferentes tipos de queso para un sabor más complejo y equilibrado. Por ejemplo, una mezcla de mozzarella y cheddar es una excelente opción.
Opciones de Jamón:
- Jamón Cocido: La opción más común y económica. Elige uno de buena calidad para un mejor sabor.
- Jamón Serrano: Aporta un sabor más intenso y salado. Corta la grasa visible para evitar que la empanadilla quede demasiado aceitosa.
- Paleta Ibérica: Una opción más gourmet, con un sabor rico y complejo.
Opcionales:
- Orégano: Una pizca de orégano seco realza el sabor del relleno.
- Pimienta Negra: Un toque de pimienta negra recién molida añade un punto de picante.
- Nuez Moscada: Una pizca de nuez moscada rallada aporta un aroma cálido y especiado.
- Huevo Duro Picado: Añade textura y sabor al relleno.
- Cebolla Caramelizada: Un toque dulce y sabroso que complementa el jamón y el queso.
- Un poco de bechamel: Para darle mayor cremosidad al relleno.
Preparación Paso a Paso
- Preparación del Relleno: En un bol, mezcla el jamón cortado en dados con el queso rallado o en dados. Si deseas añadir especias, este es el momento de incorporarlas. Si usas cebolla caramelizada o huevo duro picado, añádelos también. Mezcla bien para que todos los ingredientes se integren.
- Relleno de las Empanadillas: Extiende las obleas sobre una superficie limpia. Coloca una cucharada generosa del relleno en el centro de cada oblea, evitando llegar a los bordes. No pongas demasiado relleno, ya que la empanadilla podría abrirse al freír.
- Cierre de las Empanadillas: Dobla la oblea por la mitad, formando una media luna. Presiona los bordes con los dedos para sellar bien la empanadilla. Para asegurar un cierre perfecto, puedes utilizar un tenedor para marcar los bordes y sellarlos herméticamente. Esto evitará que el relleno se escape durante la fritura.
- Pintado de las Empanadillas: Bate un huevo en un bol pequeño. Con un pincel de cocina, pinta la superficie de cada empanadilla con el huevo batido. Esto les dará un color dorado y brillante al freírlas. Si lo deseas, puedes espolvorear un poco de sésamo o semillas de amapola sobre las empanadillas pintadas para darles un toque crujiente y decorativo.
- Fritura de las Empanadillas: Calienta abundante aceite de oliva o girasol en una sartén honda a fuego medio-alto. La temperatura ideal del aceite debe ser de unos 170-180°C. Para comprobar la temperatura, puedes echar un trocito de pan en el aceite; si se dora rápidamente, está listo. Fríe las empanadillas en tandas, sin sobrecargar la sartén, para que se doren de manera uniforme. Cocina cada lado durante aproximadamente 2-3 minutos, o hasta que estén doradas y crujientes.
- Escurrido y Servido: Retira las empanadillas de la sartén con una espumadera y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. Sirve las empanadillas calientes o templadas. Puedes acompañarlas con una salsa de tomate casera, mayonesa o alioli.
Consejos y Trucos para unas Empanadillas Perfectas
- Calidad de los Ingredientes: Utiliza ingredientes de buena calidad para obtener el mejor sabor. Un buen jamón y un buen queso marcarán la diferencia.
- Temperatura del Aceite: Es crucial que el aceite esté a la temperatura adecuada. Si está demasiado frío, las empanadillas absorberán mucho aceite y quedarán grasientas. Si está demasiado caliente, se quemarán por fuera y quedarán crudas por dentro.
- No Sobrecargar la Sartén: Fríe las empanadillas en tandas para que la temperatura del aceite no baje demasiado. Si sobrecargas la sartén, las empanadillas tardarán más en dorarse y absorberán más aceite.
- Sellado Perfecto: Asegúrate de sellar bien los bordes de las empanadillas para evitar que el relleno se escape durante la fritura. Utiliza un tenedor para marcar los bordes y sellarlos herméticamente.
- Congelación: Puedes congelar las empanadillas antes de freírlas. Colócalas en una bandeja separadas y congélalas. Una vez congeladas, puedes guardarlas en una bolsa de congelación. Para freírlas, no es necesario descongelarlas; simplemente fríelas directamente en aceite caliente durante unos minutos más.
- Horneado: Si prefieres evitar la fritura, puedes hornear las empanadillas. Precalienta el horno a 180°C. Coloca las empanadillas sobre una bandeja para hornear forrada con papel de hornear. Pinta la superficie de las empanadillas con huevo batido y hornea durante unos 15-20 minutos, o hasta que estén doradas.
- Variaciones: Experimenta con diferentes rellenos. Puedes añadir pollo desmenuzado, carne picada, verduras salteadas o incluso pescado. Las posibilidades son infinitas.
Variaciones Creativas para Empanadillas Originales
- Empanadillas de Queso de Cabra y Miel: Rellena las empanadillas con queso de cabra cremoso y un chorrito de miel. El contraste dulce y salado es delicioso.
- Empanadillas de Espinacas y Ricotta: Una opción vegetariana saludable y sabrosa. Saltea espinacas frescas con ajo y mezcla con queso ricotta, huevo y especias.
- Empanadillas de Pollo al Curry: Utiliza pollo cocido desmenuzado y mézclalo con una salsa de curry suave. Añade pasas y almendras para un toque exótico.
- Empanadillas de Chorizo y Queso Manchego: Una combinación española clásica y contundente. Utiliza chorizo picante para un sabor más intenso.
- Empanadillas Dulces de Manzana y Canela: Rellena las empanadillas con manzana pelada y cortada en dados, azúcar, canela y un poco de mantequilla. Hornea hasta que estén doradas y sírvelas con una bola de helado de vainilla.
Consideraciones sobre la Freidura y la Salud
Si bien las empanadillas fritas son deliciosas, es importante tener en cuenta que la fritura añade calorías y grasas a la receta. Para minimizar el impacto en la salud, utiliza aceite de oliva de buena calidad y asegúrate de escurrir bien las empanadillas sobre papel absorbente después de freírlas. Además, consume las empanadillas con moderación y equilibra tu dieta con alimentos saludables.
La opción de hornear las empanadillas es una alternativa más saludable a la fritura, ya que reduce significativamente la cantidad de grasa. Las empanadillas horneadas tienen un sabor ligeramente diferente, pero siguen siendo deliciosas y satisfactorias.
Origen e Historia de las Empanadillas
La empanadilla tiene una larga historia que se remonta a la antigüedad. Se cree que los primeros antecedentes de la empanadilla se encuentran en la cocina persa y árabe, desde donde se extendieron por todo el Mediterráneo y Europa. En España, la empanadilla se convirtió en un plato popular en la Edad Media y ha evolucionado a lo largo de los siglos, adaptándose a los ingredientes y gustos de cada región.
El nombre "empanadilla" proviene del verbo "empanar", que significa cubrir con pan. Originalmente, las empanadillas se elaboraban con una masa de pan gruesa que envolvía un relleno de carne, pescado o verduras. Con el tiempo, la masa se hizo más fina y se empezaron a utilizar diferentes tipos de harina y rellenos.
Hoy en día, las empanadillas son un plato muy versátil que se puede encontrar en diferentes versiones en todo el mundo. Desde las empanadas argentinas hasta los samosas indios, cada cultura ha adaptado la empanadilla a sus propios ingredientes y tradiciones culinarias.
Conclusión
Las empanadillas de jamón y queso fritas son un bocado delicioso y fácil de preparar que siempre triunfa. Con esta receta, podrás disfrutar de un clásico de la cocina española en casa. No dudes en experimentar con diferentes rellenos y especias para crear tus propias versiones personalizadas. ¡Buen provecho!
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