La tarta de jamón, queso y cebolla caramelizada es una combinación de sabores que deleita a cualquier paladar. La dulzura de la cebolla caramelizada, la salinidad del jamón y la cremosidad del queso se unen en una base crujiente para crear una experiencia culinaria inolvidable. Esta receta, aunque parezca sofisticada, es sorprendentemente fácil de preparar y perfecta para cualquier ocasión, desde una cena informal hasta una celebración especial.
Paso 1: En un bol grande, mezcla la harina y la sal. Agrega la mantequilla fría y, con la punta de los dedos o con un procesador de alimentos, mezcla hasta obtener una textura arenosa. Es importante que la mantequilla esté fría para que la masa quede crujiente.
Paso 2: Agrega el huevo y mezcla. Luego, añade el agua fría poco a poco, mezclando hasta que la masa se una. No amases en exceso, solo hasta que se forme una bola.
Paso 3: Envuelve la masa en papel film y refrigera durante al menos 30 minutos. Esto ayudará a que la masa se relaje y sea más fácil de extender.
Paso 1: Mientras la masa reposa, prepara la cebolla caramelizada. Pela y corta las cebollas en juliana fina.
Paso 2: En una sartén grande, derrite la mantequilla y calienta el aceite de oliva a fuego medio-bajo. Agrega las cebollas y cocina lentamente, removiendo ocasionalmente, durante unos 30-40 minutos, o hasta que estén doradas y caramelizadas. La paciencia es clave para obtener un buen caramelizado.
Paso 3: Agrega el azúcar moreno, la sal y la pimienta. Cocina durante unos minutos más, removiendo, hasta que el azúcar se disuelva y se integre con las cebollas. Retira del fuego y reserva.
Paso 1: Precalienta el horno a 180°C (350°F); Engrasa y enharina un molde para tarta (de unos 24-26 cm de diámetro).
Paso 2: En una superficie enharinada, extiende la masa con un rodillo hasta obtener un grosor de unos 3-4 mm. Transfiere la masa al molde, presionando suavemente para que se ajuste a la base y los bordes. Recorta el exceso de masa de los bordes.
Paso 3: Pincha la base de la masa con un tenedor varias veces. Esto evitará que se hinche durante la cocción.
Paso 4: Cubre la base con la cebolla caramelizada, distribuyéndola uniformemente.
Paso 5: Espolvorea el jamón cortado en cubos o tiras sobre la cebolla.
Paso 6: Cubre con el queso rallado.
Paso 7: En un bol aparte, bate los huevos con la nata, la nuez moscada, sal y pimienta al gusto. Vierte esta mezcla sobre el relleno de la tarta, asegurándote de que cubra todos los ingredientes.
Paso 1: Hornea en el horno precalentado durante 35-40 minutos, o hasta que la masa esté dorada y el relleno esté firme y ligeramente dorado.
Paso 2: Si los bordes de la tarta se doran demasiado rápido, puedes cubrirlos con papel de aluminio durante la cocción.
Paso 3: Retira la tarta del horno y deja que repose durante unos 10 minutos antes de servir. Esto permitirá que los sabores se asienten y que el relleno se asiente.
Corta la tarta en porciones y sírvela caliente. ¡Disfruta de esta deliciosa combinación de sabores!
El éxito de esta tarta reside en la calidad de los ingredientes y en la paciencia al caramelizar las cebollas. No te apresures en este paso, ya que es fundamental para obtener un sabor dulce y profundo que complemente el jamón y el queso. Utiliza una buena mantequilla y aceite de oliva para realzar el sabor de la cebolla.
Es importante recordar que estas son estimaciones aproximadas y pueden variar dependiendo de los ingredientes y las cantidades utilizadas.
Esta tarta es un plato rico y sabroso, por lo que se recomienda consumirla con moderación como parte de una dieta equilibrada.
Esta receta es relativamente sencilla, pero aquí hay algunos consejos para principiantes:
Para los cocineros experimentados, aquí hay algunas sugerencias para refinar la receta:
La tarta de jamón, queso y cebolla caramelizada es una receta versátil y deliciosa que se adapta a diferentes gustos y ocasiones. Desde la preparación de la masa hasta el horneado, cada paso está diseñado para ofrecer una experiencia culinaria satisfactoria. Experimenta con diferentes ingredientes y variaciones para crear tu propia versión de esta tarta irresistible. ¡Buen provecho!
Esta receta, con su equilibrio perfecto entre dulce y salado, crujiente y cremoso, es una excelente opción para cualquier amante de la buena comida. Anímate a prepararla y sorprende a tus invitados con este clásico reinventado.