El arrollado de pollo, jamón y queso es un plato versátil y sabroso, perfecto para cualquier ocasión. Desde una comida familiar hasta un almuerzo para llevar, esta receta combina la jugosidad del pollo con la riqueza del jamón y el queso derretido, creando una explosión de sabores que deleitará a todos. Esta guía detallada te proporcionará una receta fácil de seguir, junto con consejos y trucos para lograr un arrollado perfecto cada vez.

¿Por qué elegir el arrollado de pollo, jamón y queso?

Más allá de su delicioso sabor, el arrollado de pollo ofrece varias ventajas:

  • Versatilidad: Se puede servir caliente o frío, como plato principal o como parte de un buffet.
  • Facilidad de preparación: La receta es sencilla y no requiere habilidades culinarias avanzadas.
  • Adaptabilidad: Se puede personalizar con diferentes ingredientes y especias para adaptarlo a tus gustos.
  • Agradable para todos: Generalmente gusta tanto a niños como a adultos.
  • Económico: Utiliza ingredientes accesibles y relativamente baratos.

Ingredientes Necesarios

Antes de comenzar, asegúrate de tener todos los ingredientes a mano. La calidad de los ingredientes influirá directamente en el sabor final del arrollado.

  • Pechugas de pollo: 2 pechugas grandes, deshuesadas y sin piel. (Aproximadamente 500-600 gramos). Prioriza pechugas gruesas para facilitar el enrollado.
  • Jamón cocido: 150 gramos, en lonchas finas. El jamón serrano también puede ser utilizado para un sabor más intenso, pero es más salado.
  • Queso: 150 gramos, en lonchas finas (muzzarella, queso gouda, queso edam o similar). El queso debe fundir bien. El queso provolone, aunque sabroso, puede ser difícil de cortar una vez fundido.
  • Huevo: 1 huevo grande.
  • Pan rallado: 50 gramos. Se puede utilizar pan rallado casero para un sabor más auténtico.
  • Ajo: 1 diente de ajo, picado finamente.
  • Perejil fresco: 2 cucharadas, picado finamente.
  • Sal y pimienta negra: Al gusto.
  • Aceite de oliva: Cantidad necesaria para engrasar la bandeja y freír (opcional).
  • Opcional: Mostaza Dijon, espinacas frescas, pimientos asados, hierbas provenzales.

Utensilios Necesarios

Contar con los utensilios adecuados facilitará el proceso de preparación.

  • Tabla de cortar: Para preparar los ingredientes.
  • Cuchillo afilado: Para cortar las pechugas de pollo.
  • Papel film transparente: Para aplanar las pechugas.
  • Mazo de cocina o rodillo: Para aplanar las pechugas.
  • Bol grande: Para mezclar los ingredientes del relleno.
  • Bandeja para horno: Para hornear el arrollado.
  • Papel de horno: Para evitar que el arrollado se pegue a la bandeja.
  • Hilo de cocina: Para atar el arrollado (opcional).

Preparación Paso a Paso

Sigue estos pasos para preparar un arrollado de pollo, jamón y queso perfecto:

Paso 1: Preparar las Pechugas de Pollo

Este es un paso crucial para asegurar una cocción uniforme y facilitar el enrollado.

  1. Cortar las pechugas: Coloca cada pechuga sobre la tabla de cortar. Con un cuchillo afilado, córtalas horizontalmente por la mitad, como si estuvieras abriendo un libro. Esto te dará dos filetes finos por cada pechuga.
  2. Aplanar las pechugas: Coloca cada filete entre dos hojas de papel film transparente. Con un mazo de cocina o un rodillo, golpea suavemente para aplanar las pechugas hasta que tengan un grosor uniforme de aproximadamente 0.5 cm. Esto ayudará a que se cocinen de manera uniforme y facilitará el enrollado. Evita golpear demasiado fuerte para no romper la carne.
  3. Sazonar las pechugas: Sazona las pechugas aplanadas con sal, pimienta y ajo picado. Asegúrate de sazonar ambos lados de cada filete. Si deseas, puedes agregar otras especias como pimentón dulce, orégano o hierbas provenzales.

Paso 2: Preparar el Relleno

El relleno es lo que le da sabor y personalidad al arrollado. Puedes experimentar con diferentes ingredientes según tus preferencias.

  1. Preparar la mezcla de huevo: En un bol pequeño, bate el huevo con un tenedor. Añade sal, pimienta y perejil picado. Reserva.

Paso 3: Rellenar y Enrollar el Pollo

Este paso requiere cuidado y precisión para asegurar que el arrollado quede bien formado.

  1. Colocar las lonchas de jamón y queso: Sobre cada filete de pollo aplanado, coloca lonchas de jamón y queso, cubriendo toda la superficie de manera uniforme. Asegúrate de no sobrecargar el relleno para que el arrollado se cierre correctamente.
  2. Enrollar el pollo: Comienza a enrollar cada filete de pollo desde un extremo, apretando firmemente para formar un rollo compacto. Asegúrate de que el relleno quede bien contenido dentro del pollo.
  3. Sellar el arrollado: Si es necesario, utiliza hilo de cocina para atar el arrollado y asegurar que mantenga su forma durante la cocción. Esto es especialmente útil si el relleno es abundante o si el pollo tiende a abrirse.

Paso 4: Empanizar el Arrollado (Opcional)

Empanizar el arrollado le dará una textura crujiente y un color dorado apetitoso.

  1. Pasar por huevo: Sumerge cada arrollado en la mezcla de huevo batido, asegurándote de que quede bien cubierto.
  2. Pasar por pan rallado: Pasa cada arrollado por el pan rallado, presionando suavemente para que se adhiera bien.

Paso 5: Cocinar el Arrollado

Existen diferentes métodos para cocinar el arrollado, cada uno con sus propias ventajas y desventajas.

Opción 1: Hornear

Hornear es una opción saludable y sencilla.

  1. Precalentar el horno: Precalienta el horno a 180°C (350°F).
  2. Preparar la bandeja: Cubre una bandeja para horno con papel de horno.
  3. Colocar el arrollado: Coloca los arrollados en la bandeja, asegurándote de dejar espacio entre ellos.
  4. Hornear: Hornea durante 25-30 minutos, o hasta que el pollo esté completamente cocido y el queso se haya derretido. El tiempo de cocción puede variar dependiendo del tamaño de los arrollados y la potencia del horno. Para asegurarte de que el pollo está cocido, puedes utilizar un termómetro de cocina. La temperatura interna debe alcanzar los 74°C (165°F).

Opción 2: Freír

Freír le dará al arrollado una textura más crujiente, pero también aumentará su contenido calórico.

  1. Calentar el aceite: Calienta abundante aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto.
  2. Freír el arrollado: Fríe los arrollados durante 5-7 minutos por cada lado, o hasta que estén dorados y cocidos por dentro. Asegúrate de voltearlos con cuidado para que se cocinen de manera uniforme.
  3. Escurrir el exceso de aceite: Coloca los arrollados sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Opción 3: Cocinar a la Plancha

Una opción más ligera que freír, conservando un poco de sabor tostado.

  1. Calentar la plancha: Calienta una plancha a fuego medio.
  2. Cocinar el arrollado: Cocina los arrollados durante 8-10 minutos por cada lado, girándolos para asegurar una cocción uniforme.

Paso 6: Servir

Una vez cocido, el arrollado de pollo está listo para servir.

  1. Dejar reposar: Deja reposar el arrollado durante unos minutos antes de cortarlo. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan y evitará que se seque.
  2. Cortar en rodajas: Corta el arrollado en rodajas de aproximadamente 2 cm de grosor.
  3. Servir: Sirve el arrollado caliente o frío, acompañado de tu salsa favorita. Algunas opciones populares incluyen salsa de champiñones, salsa barbacoa, salsa de queso o simplemente una ensalada fresca.

Consejos y Trucos para un Arrollado Perfecto

Aquí te dejamos algunos consejos adicionales para asegurarte de que tu arrollado de pollo, jamón y queso sea un éxito:

  • Utiliza ingredientes de calidad: La calidad de los ingredientes influye directamente en el sabor final del plato.
  • No sobrecargues el relleno: Demasiado relleno puede dificultar el enrollado y hacer que el arrollado se abra durante la cocción.
  • Asegura una cocción uniforme: Aplanar las pechugas de pollo ayuda a que se cocinen de manera uniforme.
  • No cocines demasiado el pollo: El pollo seco es poco apetecible. Utiliza un termómetro de cocina para asegurarte de que está cocido pero no seco.
  • Experimenta con diferentes ingredientes: No tengas miedo de experimentar con diferentes rellenos y especias para crear tu propia versión del arrollado de pollo.
  • Prepara el arrollado con anticipación: Puedes preparar el arrollado con anticipación y guardarlo en el refrigerador hasta el momento de cocinarlo.
  • Congela el arrollado: El arrollado cocido se puede congelar para consumirlo posteriormente. Para descongelarlo, déjalo en el refrigerador durante la noche.

Variaciones de la Receta

La receta del arrollado de pollo, jamón y queso es muy versátil y se puede adaptar a diferentes gustos y preferencias. Aquí te presentamos algunas ideas para variar la receta:

  • Arrollado de pollo con espinacas y queso ricotta: Sustituye el jamón por espinacas frescas salteadas y añade queso ricotta al relleno.
  • Arrollado de pollo con champiñones y salsa de queso: Añade champiñones salteados al relleno y sirve el arrollado con una salsa de queso cremosa.
  • Arrollado de pollo con pimientos asados y queso provolone: Sustituye el jamón por pimientos asados y utiliza queso provolone para un sabor más intenso.
  • Arrollado de pollo con hierbas provenzales y queso mozzarella: Añade hierbas provenzales al relleno y utiliza queso mozzarella para un sabor mediterráneo.
  • Arrollado de pollo con salsa barbacoa y queso cheddar: Marina las pechugas de pollo en salsa barbacoa antes de rellenarlas y utiliza queso cheddar para un sabor ahumado.

Información Nutricional (Aproximada por porción)

La información nutricional puede variar dependiendo de los ingredientes utilizados y el tamaño de las porciones.

  • Calorías: 300-400 kcal
  • Proteínas: 30-40 gramos
  • Grasas: 15-25 gramos
  • Carbohidratos: 5-10 gramos

Conclusión

El arrollado de pollo, jamón y queso es una receta sencilla, deliciosa y versátil que puedes disfrutar en cualquier momento. Con esta guía detallada y los consejos proporcionados, podrás preparar un arrollado perfecto cada vez. ¡Anímate a probar esta receta y sorprende a tus familiares y amigos con este plato exquisito!

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