Este rollo de pollo con jamón y queso al horno es una receta sencilla y sabrosa, perfecta para una comida familiar o una ocasión especial. Es versátil, fácil de preparar y garantiza un plato principal que encantará a todos. Lo mejor de todo es que se puede adaptar a tus gustos personales, variando los ingredientes del relleno y las especias.

Ingredientes

  • 1 kg de pechugas de pollo, sin piel ni hueso
  • 200g de jamón cocido en lonchas
  • 200g de queso (mozzarella, gouda, emmental o el que más te guste) en lonchas
  • 1 cebolla pequeña, picada finamente
  • 2 dientes de ajo, picados finamente
  • 50g de pan rallado
  • 1 huevo
  • 2 cucharadas de perejil fresco picado
  • 1 cucharadita de orégano seco
  • Sal y pimienta al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Opcional: mostaza Dijon o miel para untar
  • Opcional: pimientos asados en tiras, espinacas salteadas, champiñones salteados para el relleno

Preparación Paso a Paso

  1. Precalentar el horno: Precalienta el horno a 180°C (350°F).
  2. Preparar las pechugas de pollo: Coloca las pechugas de pollo entre dos hojas de papel film (papel transparente de cocina) y aplánalas con un mazo de cocina o rodillo hasta que tengan un grosor uniforme de aproximadamente 0.5 cm. Esto facilita el enrollado y asegura una cocción pareja.
  3. Preparar el relleno: En un bol, mezcla la cebolla picada, el ajo picado, el pan rallado, el huevo, el perejil picado, el orégano, la sal y la pimienta. Si deseas, puedes añadir otros ingredientes al relleno, como pimientos asados en tiras o espinacas salteadas. El objetivo es crear una mezcla que le dé sabor y textura al rollo.
  4. Rellenar las pechugas: Extiende las pechugas de pollo aplanadas sobre una superficie limpia. Unta cada pechuga con una fina capa de mostaza Dijon o miel (opcional). Coloca lonchas de jamón y queso sobre cada pechuga, dejando un pequeño borde libre en los extremos para facilitar el enrollado. A continuación, distribuye la mezcla de relleno preparada sobre el jamón y el queso.
  5. Enrollar las pechugas: Enrolla cada pechuga de pollo con cuidado, comenzando por uno de los extremos, formando un rollo compacto. Asegura los rollos con palillos de dientes o hilo de cocina para evitar que se abran durante la cocción. Este paso es crucial para mantener la forma del rollo y evitar que el relleno se salga.
  6. Sellar los rollos (opcional pero recomendado): Calienta un poco de aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Sella los rollos de pollo por todos los lados hasta que estén ligeramente dorados. Esto sellará los jugos y dará un color más atractivo al rollo. Si prefieres una opción más saludable, puedes omitir este paso.
  7. Hornear los rollos: Coloca los rollos de pollo en una fuente para horno ligeramente engrasada. Rocía los rollos con un poco de aceite de oliva. Hornea durante 30-40 minutos, o hasta que el pollo esté completamente cocido y el queso derretido y dorado. El tiempo de cocción puede variar dependiendo del tamaño de los rollos y de tu horno. Para asegurarte de que el pollo está cocido, puedes usar un termómetro de cocina. La temperatura interna debe ser de al menos 74°C (165°F).
  8. Dejar reposar: Retira los rollos del horno y déjalos reposar durante unos 5-10 minutos antes de cortarlos. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan, haciendo que el rollo esté más jugoso y fácil de cortar.
  9. Servir: Retira los palillos de dientes o el hilo de cocina. Corta los rollos en rodajas y sirve calientes. Puedes acompañar el rollo de pollo con una ensalada fresca, puré de patatas, arroz o verduras asadas.

Consejos y Variaciones

  • Variaciones del relleno: Experimenta con diferentes tipos de queso, jamón y verduras para crear tu propia versión del rollo de pollo. Prueba con queso provolone, jamón serrano, espinacas frescas, champiñones salteados, pimientos asados, aceitunas en rodajas, o incluso un poco de pesto.
  • Hierbas y especias: Añade otras hierbas y especias al relleno para darle más sabor al rollo. Prueba con albahaca fresca picada, tomillo seco, romero seco, paprika ahumada, ajo en polvo o cebolla en polvo.
  • Salsa: Sirve el rollo de pollo con tu salsa favorita. Una salsa de champiñones, una salsa de tomate casera, una salsa de queso o incluso una simple salsa de yogur con hierbas frescas son excelentes opciones.
  • Para una versión más ligera: Utiliza pechugas de pollo bajas en grasa, jamón cocido bajo en sodio y queso mozzarella light. Hornea los rollos en lugar de sellarlos en la sartén.
  • Preparación anticipada: Puedes preparar los rollos de pollo con antelación y guardarlos en el refrigerador hasta el momento de hornearlos. Asegúrate de cubrirlos bien para evitar que se sequen.
  • Congelación: Los rollos de pollo también se pueden congelar. Envuelve cada rollo individualmente en papel film y luego colócalos en una bolsa para congelar. Para descongelarlos, déjalos en el refrigerador durante la noche.

Esta receta es una guía, siéntete libre de adaptarla a tus gustos y preferencias personales. ¡Disfruta de tu delicioso rollo de pollo con jamón y queso al horno!

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