Las albóndigas de pollo son una alternativa deliciosa y más ligera a las tradicionales albóndigas de carne de res. Utilizando ingredientes accesibles de Mercadona, esta receta ofrece una opción fácil, saludable y adaptable a diferentes gustos y necesidades dietéticas. A continuación, exploraremos una receta detallada y completa, considerando desde los ingredientes básicos hasta las variaciones posibles y consejos para obtener un resultado óptimo.

Ingredientes (aproximadamente 20 albóndigas):

  • 500g de carne picada de pollo Mercadona: Preferiblemente magra para reducir el contenido de grasa.
  • 1 huevo mediano: Ayuda a ligar los ingredientes.
  • 50g de pan rallado: Preferiblemente integral o sin gluten si se busca una opción más saludable o apta para celíacos.
  • 1/2 cebolla mediana: Picada finamente. Aporta sabor y humedad.
  • 2 dientes de ajo: Picados finamente o prensados. Imprescindible para un buen sabor.
  • Perejil fresco picado: Un buen manojo. Aporta frescura y color.
  • Sal y pimienta negra: Al gusto. Ajustar según preferencias.
  • Aceite de oliva virgen extra: Para cocinar las albóndigas.

Para la Salsa (Opciones):

Salsa de Tomate Casera:

  • 500g de tomate triturado Mercadona: O tomates frescos pelados y triturados.
  • 1/4 cebolla: Picada finamente.
  • 1 diente de ajo: Picado finamente o prensado.
  • 1 cucharadita de azúcar: Para equilibrar la acidez del tomate.
  • Orégano seco: Al gusto.
  • Aceite de oliva virgen extra:.
  • Sal y pimienta negra: Al gusto.

Salsa en Conserva (Opción Rápida):

  • Un bote de salsa de tomate estilo casero Mercadona: Elegir una opción baja en azúcar y sodio si es posible.

Salsa Bechamel Ligera:

  • 500ml de leche desnatada: O leche vegetal para una opción vegana.
  • 30g de harina integral: O harina de arroz para una opción sin gluten.
  • 20g de aceite de oliva virgen extra:.
  • Nuez moscada: Al gusto.
  • Sal y pimienta blanca: Al gusto.

Preparación:

Paso 1: Preparación de la Mezcla de las Albóndigas

  1. En un bol grande, mezclar la carne picada de pollo, el huevo, el pan rallado, la cebolla picada, el ajo picado, el perejil picado, la sal y la pimienta.
  2. Asegurarse de que todos los ingredientes estén bien integrados. Para ello, amasar con las manos durante unos minutos hasta obtener una masa homogénea.
  3. Si la mezcla está demasiado húmeda, añadir un poco más de pan rallado. Si está demasiado seca, añadir un poco de leche o agua. La consistencia debe permitir formar albóndigas sin que se desmoronen.

Paso 2: Formar las Albóndigas

  1. Con las manos ligeramente humedecidas, tomar porciones de la mezcla y formar albóndigas del tamaño deseado. Aproximadamente del tamaño de una nuez o una pelota de golf pequeña.
  2. Colocar las albóndigas en un plato o bandeja.

Paso 3: Cocinar las Albóndigas

Existen varias opciones para cocinar las albóndigas. La elección dependerá del tiempo disponible, las preferencias personales y el objetivo de obtener un plato más o menos saludable.

Opción 1: Fritas (Menos Saludable, Mayor Sabor)

  1. Calentar abundante aceite de oliva virgen extra en una sartén a fuego medio.
  2. Freír las albóndigas en tandas, evitando sobrecargar la sartén, hasta que estén doradas por todos los lados y cocidas por dentro. Aproximadamente 5-7 minutos por tanda.
  3. Retirar las albóndigas con una espumadera y colocarlas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Opción 2: Al Horno (Más Saludable)

  1. Precalentar el horno a 180°C.
  2. Colocar las albóndigas en una bandeja para hornear ligeramente engrasada con aceite de oliva.
  3. Hornear durante 20-25 minutos, o hasta que estén doradas y cocidas por dentro. Es recomendable darles la vuelta a mitad de cocción para que se doren uniformemente.

Opción 3: Cocidas en Salsa (Más Jugosas)

  1. Preparar la salsa de tomate o bechamel (ver instrucciones más abajo).
  2. Añadir las albóndigas crudas directamente a la salsa caliente.
  3. Cocinar a fuego lento durante 20-25 minutos, o hasta que las albóndigas estén cocidas y la salsa haya espesado. Remover ocasionalmente para evitar que se peguen al fondo;

Paso 4: Preparación de la Salsa (Elegir una Opción)

Salsa de Tomate Casera:

  1. Calentar un poco de aceite de oliva virgen extra en una sartén a fuego medio.
  2. Añadir la cebolla picada y sofreír hasta que esté transparente.
  3. Añadir el ajo picado y sofreír durante un minuto más, teniendo cuidado de que no se queme.
  4. Añadir el tomate triturado, el azúcar, el orégano, la sal y la pimienta.
  5. Cocinar a fuego lento durante al menos 20 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que la salsa haya espesado y los sabores se hayan integrado.

Salsa Bechamel Ligera:

  1. Calentar el aceite de oliva virgen extra en una cacerola a fuego medio.
  2. Añadir la harina y cocinar durante un minuto, removiendo constantemente con unas varillas, para formar un roux.
  3. Verter la leche poco a poco, sin dejar de remover con las varillas, para evitar que se formen grumos.
  4. Continuar cocinando a fuego lento, removiendo constantemente, hasta que la salsa haya espesado.
  5. Añadir la nuez moscada, la sal y la pimienta blanca.
  6. Cocinar durante un minuto más, removiendo constantemente.

Paso 5: Servir

  1. Servir las albóndigas calientes, bañadas en la salsa elegida.
  2. Opcionalmente, decorar con perejil fresco picado.
  3. Acompañar con arroz blanco, pasta, puré de patatas, o una ensalada.

Variaciones y Consejos:

  • Para una opción más saludable: Utilizar carne picada de pollo magra, pan rallado integral, cocinar las albóndigas al horno o cocidas en salsa, y preparar una salsa de tomate casera baja en azúcar y sodio.
  • Para una opción sin gluten: Utilizar pan rallado sin gluten o harina de arroz en la salsa bechamel.
  • Para una opción vegetariana: Sustituir la carne picada de pollo por proteína vegetal texturizada (soja texturizada) hidratada y bien escurrida.
  • Añadir verduras a la mezcla de las albóndigas: Zanahoria rallada, calabacín rallado, o espinacas picadas finamente. Esto aumentará el contenido de nutrientes y fibra.
  • Experimentar con diferentes especias y hierbas: Pimentón dulce o picante, comino, tomillo, romero, etc.
  • Para evitar que las albóndigas se sequen: Añadir un poco de caldo de pollo o leche a la mezcla.
  • Congelar las albóndigas: Se pueden congelar tanto crudas como cocidas. Para congelarlas crudas, colocarlas en una bandeja separadas entre sí y congelarlas. Una vez congeladas, transferirlas a una bolsa de congelación. Para congelarlas cocidas, dejarlas enfriar completamente antes de congelarlas.
  • Para descongelar las albóndigas: Dejarlas descongelar en el refrigerador durante la noche o cocinarlas directamente congeladas, añadiendo unos minutos más de cocción.

Análisis Nutricional (aproximado por porción):

El análisis nutricional dependerá de los ingredientes específicos utilizados y el tamaño de las porciones. Sin embargo, una porción de albóndigas de pollo (aproximadamente 4-5 albóndigas) puede contener:

  • Calorías: 250-350 kcal
  • Proteínas: 20-30g
  • Grasas: 10-20g (dependiendo del tipo de carne picada de pollo utilizada y el método de cocción)
  • Carbohidratos: 15-25g
  • Fibra: 2-4g

Es importante tener en cuenta que estos valores son aproximados y pueden variar. Para un análisis nutricional más preciso, se recomienda utilizar una aplicación o herramienta online de cálculo de calorías y nutrientes.

Conclusión:

Esta receta de albóndigas de pollo Mercadona ofrece una opción deliciosa, fácil y saludable para disfrutar de una comida casera. La versatilidad de la receta permite adaptarla a diferentes gustos y necesidades dietéticas, haciendo de este plato una excelente opción para toda la familia. Desde la elección de los ingredientes hasta el método de cocción, cada paso puede ser ajustado para obtener un resultado óptimo y personalizado. Además, la posibilidad de congelar las albóndigas las convierte en una opción práctica para tener siempre a mano una comida rápida y nutritiva.

tags: #Albondiga #Receta #Pollo

Información sobre el tema: