Pollo Asado Relleno de Jamón y Queso: Receta Jugosa

El pollo asado relleno de jamón y queso es un plato clásico que combina la sencillez de la preparación con un resultado espectacular. Esta receta‚ que exploraremos en profundidad‚ no solo es fácil de seguir‚ sino que también ofrece un sabor rico y una textura jugosa que deleitará a todos en la mesa. Desde los ingredientes esenciales hasta las técnicas de cocción más refinadas‚ cubriremos cada aspecto para que puedas preparar un pollo asado perfecto en tu propia cocina.

Ingredientes Necesarios

La calidad de los ingredientes es fundamental para el éxito de cualquier receta. Aquí te presentamos una lista detallada de lo que necesitarás:

Un pollo entero (aproximadamente 1.5-2 kg): El tamaño puede variar según el número de comensales. Opta por un pollo de buena calidad‚ preferiblemente orgánico‚ para un sabor superior y una textura más tierna.
Jamón cocido (200 gramos): Utiliza jamón de buena calidad cortado en lonchas finas. El jamón serrano también es una opción‚ aunque aportará un sabor más intenso.
Queso (200 gramos): El queso puede ser mozzarella‚ havarti‚ gouda o cualquier otro queso fundente de tu preferencia. La mozzarella aporta una textura cremosa y un sabor suave‚ mientras que el gouda ofrece un sabor más pronunciado.
Aceite de oliva virgen extra: Un buen aceite de oliva es esencial para realzar los sabores y mantener el pollo jugoso.
Ajo (4 dientes): El ajo aporta un aroma y sabor inigualables. Se pueden usar tanto dientes de ajo frescos picados como ajo en polvo.
Hierbas provenzales: Una mezcla de hierbas secas como romero‚ tomillo‚ orégano y lavanda. Estas hierbas aportan un toque mediterráneo y aromático al pollo.
Pimentón dulce: Añade un color y sabor sutilmente ahumado al pollo.
Sal y pimienta negra recién molida: Para sazonar al gusto. La pimienta recién molida aporta un sabor más fresco y aromático.
Opcional: Un chorrito de vino blanco seco.

Preparación Paso a Paso

La preparación del pollo asado relleno es un proceso sencillo‚ pero requiere atención al detalle para asegurar un resultado óptimo. Sigue estos pasos cuidadosamente:

Preparación del pollo: Lava el pollo por dentro y por fuera con agua fría. Sécale bien con papel de cocina‚ tanto por dentro como por fuera. Esto es crucial para que la piel quede crujiente durante el asado.
Preparación del relleno: Corta el jamón y el queso en tiras o cubos pequeños. Si usas queso mozzarella fresco‚ asegúrate de escurrirlo bien para evitar que suelte demasiada agua durante la cocción.
Sazonar el pollo: En un bol pequeño‚ mezcla el aceite de oliva‚ el ajo picado (o en polvo)‚ las hierbas provenzales‚ el pimentón dulce‚ la sal y la pimienta. Si deseas‚ añade un chorrito de vino blanco seco para un sabor más complejo. Unta esta mezcla por todo el pollo‚ asegurándote de cubrir bien tanto la piel como el interior.
Rellenar el pollo: Con cuidado‚ separa la piel del pollo del cuerpo‚ creando un espacio para introducir el relleno. Introduce las lonchas de jamón y el queso dentro de este espacio‚ distribuyéndolos de manera uniforme. Asegúrate de no rellenar demasiado para que el pollo se cocine de manera uniforme. También puedes introducir parte del relleno dentro de la cavidad del pollo.
Atar el pollo (opcional): Para mantener la forma del pollo durante el asado‚ puedes atar las patas con hilo de cocina. Esto también ayuda a que el relleno se mantenga en su lugar.
Precalentar el horno: Precalienta el horno a 180°C (350°F). Es importante que el horno esté bien caliente antes de introducir el pollo para asegurar una cocción uniforme.
Asar el pollo: Coloca el pollo en una bandeja para horno. Puedes añadir unas verduras cortadas en trozos grandes (cebolla‚ zanahoria‚ patata) en la bandeja para que se asen junto con el pollo y aporten sabor al jugo. Hornea durante aproximadamente 1 hora y 30 minutos‚ o hasta que el pollo esté dorado y la temperatura interna alcance los 75°C (165°F). Utiliza un termómetro de cocina para verificar la temperatura en la parte más gruesa del muslo.
Bañar el pollo con sus jugos: Cada 20-30 minutos‚ abre el horno y baña el pollo con los jugos que se hayan formado en la bandeja. Esto ayuda a mantenerlo jugoso y a que la piel quede crujiente.
Reposo: Una vez que el pollo esté cocido‚ sácalo del horno y déjalo reposar durante unos 10-15 minutos antes de cortarlo. Esto permite que los jugos se redistribuyan‚ resultando en una carne más tierna y jugosa.

Consejos para un Pollo Asado Perfecto

Aquí tienes algunos consejos adicionales para asegurarte de que tu pollo asado relleno sea un éxito rotundo:

Marinada previa: Si tienes tiempo‚ marina el pollo durante unas horas o incluso toda la noche en la nevera. Esto intensificará los sabores y hará que la carne sea más tierna. Puedes usar la misma mezcla de especias y aceite de oliva que utilizaste para sazonar el pollo.
Inyectar el pollo: Para una jugosidad aún mayor‚ considera inyectar el pollo con un caldo de pollo o una mezcla de aceite de oliva y hierbas. Esto asegurará que la carne se mantenga húmeda durante la cocción.
Posición del pollo: Durante la primera mitad del tiempo de cocción‚ asa el pollo con la pechuga hacia abajo. Esto ayudará a que la pechuga se mantenga jugosa. Luego‚ gíralo para que la pechuga se dore.
Control de la temperatura: Utiliza un termómetro de cocina para asegurarte de que el pollo esté completamente cocido. La temperatura interna debe alcanzar los 75°C (165°F) en la parte más gruesa del muslo.
Piel crujiente: Para una piel extra crujiente‚ puedes untar el pollo con un poco de miel o azúcar moreno durante los últimos 15 minutos de cocción. Esto caramelizará la piel y le dará un color dorado y apetitoso.
Variaciones del relleno: Experimenta con diferentes rellenos. Puedes añadir champiñones salteados‚ espinacas‚ pimientos asados o incluso frutos secos al jamón y queso.
Guarniciones: Sirve el pollo asado relleno con tus guarniciones favoritas. Puré de patatas‚ arroz‚ ensalada‚ verduras asadas o patatas al horno son excelentes opciones.

Variaciones de la Receta

Una de las grandes ventajas de esta receta es su versatilidad. Puedes adaptarla a tus gustos y preferencias personales. Aquí te presentamos algunas ideas para variar la receta:

Relleno de espinacas y ricotta: Sustituye el jamón y queso por una mezcla de espinacas salteadas con ricotta‚ ajo y nuez moscada. Esta opción es más ligera y vegetariana.
Relleno de champiñones y queso brie: Saltea champiñones con ajo y cebolla‚ y mézclalos con queso brie. Este relleno aporta un sabor sofisticado y terroso.
Relleno de chorizo y queso manchego: Utiliza chorizo español y queso manchego para un relleno con sabor español. Añade un poco de pimentón picante para un toque extra de sabor.
Relleno de manzana y nueces: Corta manzanas en cubos pequeños y mézclalas con nueces picadas‚ canela y un poco de azúcar moreno. Este relleno aporta un sabor dulce y especiado‚ perfecto para el otoño.
Pollo asado al limón y hierbas: En lugar de hierbas provenzales‚ utiliza ralladura y zumo de limón‚ romero fresco y tomillo. Esta variación aporta un sabor fresco y cítrico.

Consideraciones sobre la Salud

El pollo asado relleno puede ser una opción saludable si se toman ciertas precauciones. Aquí te damos algunas consideraciones para optimizar el valor nutricional del plato:

Elige pollo orgánico: El pollo orgánico suele tener menos grasa y más nutrientes que el pollo convencional. Además‚ evita la exposición a antibióticos y hormonas.
Reduce la cantidad de queso: El queso puede ser alto en grasa y calorías. Utiliza una cantidad moderada de queso y opta por variedades bajas en grasa.
Utiliza jamón bajo en sodio: El jamón puede ser alto en sodio. Busca variedades bajas en sodio o utiliza jamón serrano en pequeñas cantidades.
Añade verduras al relleno: Aumenta el valor nutricional del plato añadiendo verduras al relleno. Espinacas‚ champiñones‚ pimientos y cebollas son excelentes opciones.
Cocina con aceite de oliva virgen extra: El aceite de oliva virgen extra es una fuente saludable de grasas monoinsaturadas y antioxidantes.
Controla el tamaño de la porción: El pollo asado relleno es delicioso‚ pero es importante controlar el tamaño de la porción para mantener una dieta equilibrada.

Conclusión

El pollo asado relleno de jamón y queso es un plato versátil y delicioso que puede adaptarse a cualquier ocasión. Con los ingredientes adecuados y una preparación cuidadosa‚ puedes crear un plato que deleitará a tus invitados y te permitirá disfrutar de una comida casera y nutritiva. Experimenta con diferentes rellenos y variaciones para encontrar tu combinación favorita. ¡Buen provecho!

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