El pastel napolitano de jamón, queso y tomate es una preparación culinaria versátil y reconfortante, ideal para disfrutar en cualquier ocasión. Desde un almuerzo ligero hasta una cena informal, este pastel combina la simplicidad de sus ingredientes con la riqueza de sabores que evoca la cocina italiana. A continuación, exploraremos una receta detallada, consideraciones sobre los ingredientes, variantes posibles y consejos para lograr un resultado perfecto.

Ingredientes Necesarios

  • Masa:
    • 500 gramos de harina de trigo
    • 25 gramos de levadura fresca (o 7 gramos de levadura seca)
    • 250 ml de agua tibia
    • 50 ml de aceite de oliva virgen extra
    • 10 gramos de sal
    • Una pizca de azúcar (opcional, para activar la levadura)
  • Relleno:
    • 200 gramos de jamón cocido en lonchas
    • 200 gramos de queso mozzarella (o similar, como provolone o fontina) en lonchas o rallado
    • 400 gramos de tomate triturado (preferiblemente de buena calidad)
    • 2 dientes de ajo picados finamente
    • 1 cucharadita de orégano seco
    • Aceite de oliva virgen extra
    • Sal y pimienta al gusto
  • Para pincelar (opcional):
    • 1 huevo batido
    • Semillas de sésamo o amapola (para decorar)

Preparación Paso a Paso

1. Preparación de la Masa

  1. Activar la levadura: En un recipiente pequeño, disolver la levadura fresca (o seca) en agua tibia con una pizca de azúcar (si se usa). Dejar reposar durante 5-10 minutos hasta que se forme una espuma. Esto asegura la viabilidad de la levadura.
  2. Mezclar los ingredientes secos: En un bol grande, mezclar la harina con la sal.
  3. Añadir los ingredientes líquidos: Hacer un hueco en el centro de la harina y verter la mezcla de levadura activada, el aceite de oliva y el resto del agua tibia.
  4. Amasar: Mezclar los ingredientes con una cuchara de madera hasta que se forme una masa. Luego, amasar sobre una superficie enharinada durante unos 10-15 minutos, hasta obtener una masa suave, elástica y que no se pegue a las manos. Si la masa está demasiado pegajosa, añadir un poco más de harina; si está demasiado seca, añadir un poco más de agua.
  5. Primer levado: Formar una bola con la masa, colocarla en un bol ligeramente aceitado, cubrir con un paño húmedo y dejar reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1-1.5 horas, o hasta que duplique su tamaño. La temperatura ambiente ideal para la fermentación de la levadura es de entre 25°C y 28°C.

2. Preparación del Relleno

  1. Preparar la salsa de tomate: En una sartén, calentar un poco de aceite de oliva a fuego medio. Añadir el ajo picado y sofreír durante un minuto, teniendo cuidado de que no se queme.
  2. Añadir el tomate: Verter el tomate triturado en la sartén, añadir el orégano, sal y pimienta al gusto. Cocinar a fuego lento durante unos 15-20 minutos, removiendo ocasionalmente, hasta que la salsa espese ligeramente. Dejar enfriar. Un tiempo de cocción prolongado permite que los sabores se concentren y se desarrollen plenamente.

3. Montaje del Pastel

  1. Precalentar el horno: Precalentar el horno a 180°C (350°F).
  2. Dividir la masa: Una vez que la masa haya levado, desgasificarla suavemente y dividirla en dos partes iguales.
  3. Estirar la masa: Estirar una de las partes de la masa con un rodillo sobre una superficie enharinada hasta obtener un rectángulo fino. Transferir la masa a una bandeja para horno previamente cubierta con papel de hornear.
  4. Rellenar: Extender la mitad de la salsa de tomate sobre la masa, dejando un borde libre de aproximadamente 2 cm. Colocar la mitad de las lonchas de jamón y queso sobre la salsa. Repetir las capas con el resto de la salsa, jamón y queso.
  5. Cubrir: Estirar la segunda parte de la masa y cubrir el relleno. Sellar los bordes presionando con los dedos o con un tenedor para evitar que el relleno se salga durante la cocción.
  6. Pincelar y decorar (opcional): Pincelar la superficie del pastel con huevo batido y espolvorear con semillas de sésamo o amapola, si se desea.
  7. Hornear: Hornear en el horno precalentado durante unos 25-30 minutos, o hasta que la masa esté dorada y el queso burbujeante.
  8. Enfriar y servir: Dejar enfriar el pastel durante unos minutos antes de cortarlo en porciones y servir. Se puede disfrutar caliente, tibio o frío.

Variantes y Adaptaciones

  • Vegetariana: Sustituir el jamón por verduras asadas como berenjena, calabacín y pimiento.
  • Con champiñones: Añadir champiñones salteados al relleno para un sabor más terroso.
  • Con aceitunas: Incorporar aceitunas negras o verdes en rodajas para un toque mediterráneo.
  • Con pesto: Untar la masa con pesto en lugar de salsa de tomate para una variante aromática.
  • Con ricotta y espinacas: Rellenar con una mezcla de ricotta, espinacas salteadas y nuez moscada para una versión más sustanciosa.
  • Masa integral: Usar harina integral en lugar de harina blanca para una opción más saludable.
  • Sin gluten: Utilizar una mezcla de harinas sin gluten adecuada para panadería. Es importante ajustar la cantidad de líquido según las instrucciones del fabricante de la harina sin gluten.

Consejos para un Pastel Napolitano Perfecto

  • Calidad de los ingredientes: Utilizar ingredientes frescos y de buena calidad para obtener el mejor sabor. Un buen tomate triturado y un queso sabroso marcarán la diferencia.
  • Amasado adecuado: Un buen amasado es fundamental para obtener una masa elástica y esponjosa. No escatimar en tiempo y esfuerzo durante esta etapa.
  • Tiempo de levado: Respetar los tiempos de levado de la masa. Un levado adecuado asegura una textura ligera y aireada.
  • Temperatura del horno: Precalentar el horno a la temperatura correcta y controlar el tiempo de cocción para evitar que el pastel se queme o quede crudo.
  • Enfriamiento: Dejar enfriar el pastel antes de cortarlo permite que los sabores se asienten y facilita el corte.
  • Experimentación: No dudar en experimentar con diferentes ingredientes y combinaciones para personalizar el pastel napolitano a tu gusto.
  • Consistencia de la salsa: La salsa de tomate debe tener una consistencia espesa para evitar que humedezca demasiado la masa. Si es necesario, cocinarla durante más tiempo para reducir el exceso de líquido.
  • Cantidad de relleno: No sobrecargar el pastel con demasiado relleno, ya que esto puede dificultar el cierre y la cocción adecuada.
  • Sellado de bordes: Asegurarse de sellar bien los bordes del pastel para evitar que el relleno se escape durante la cocción.
  • Conservación: El pastel napolitano se puede conservar en el refrigerador durante 2-3 días. Calentar en el horno o en el microondas antes de servir. También se puede congelar una vez cocido.

Consideraciones sobre la Salud

Si bien el pastel napolitano es una delicia, es importante tener en cuenta algunas consideraciones sobre la salud:

  • Contenido calórico: El pastel napolitano puede ser relativamente alto en calorías, dependiendo de los ingredientes utilizados. Es importante consumirlo con moderación.
  • Sodio: El jamón y el queso pueden ser altos en sodio. Si se sigue una dieta baja en sodio, optar por versiones bajas en sodio de estos ingredientes.
  • Grasas saturadas: El queso y algunos tipos de jamón pueden ser altos en grasas saturadas. Elegir quesos bajos en grasa y jamón magro.
  • Opciones más saludables: Utilizar harina integral, verduras en lugar de carne y queso bajo en grasa puede hacer que el pastel napolitano sea una opción más saludable.

Conclusión

El pastel napolitano de jamón, queso y tomate es una receta clásica que ofrece infinitas posibilidades de personalización. Con una preparación sencilla y ingredientes accesibles, este pastel es perfecto para disfrutar en familia o con amigos. Experimenta con diferentes variantes y adapta la receta a tus preferencias para crear tu propia versión única de este delicioso plato.

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