Las croquetas de patata y jamón son un clásico de la cocina española‚ un bocado cremoso y crujiente que evoca recuerdos de infancia y reuniones familiares. Esta receta te guiará paso a paso para que puedas preparar estas delicias en casa‚ logrando un resultado perfecto que impresionará a todos.

Ingredientes

  • 1 kg de patatas (preferiblemente una variedad harinosa como la Kennebec o la Monalisa)
  • 150 g de jamón serrano (en taquitos pequeños)
  • 1 cebolla pequeña
  • 50 g de mantequilla
  • 50 g de harina de trigo
  • 750 ml de leche entera
  • Nuez moscada (al gusto)
  • Sal y pimienta negra recién molida (al gusto)
  • 2 huevos grandes
  • Pan rallado (suficiente para rebozar)
  • Aceite de oliva virgen extra (para freír)

Preparación Paso a Paso

1. Cocción de las Patatas

El primer paso‚ y uno de los más importantes‚ es la correcta cocción de las patatas. Una cocción adecuada asegurará una masa de croqueta suave y sin grumos.

  1. Lava bien las patatas y ponlas a cocer con piel en una olla grande con agua y sal. Asegúrate de que estén completamente cubiertas.
  2. Cocina las patatas hasta que estén tiernas. Para comprobarlo‚ puedes pincharlas con un tenedor: si entra y sale fácilmente‚ están listas. Generalmente‚ esto tomará entre 20 y 30 minutos‚ dependiendo del tamaño de las patatas.
  3. Una vez cocidas‚ escúrrelas inmediatamente y déjalas enfriar ligeramente para poder manipularlas sin quemarte. Pélalas cuando aún estén calientes‚ ya que así será más fácil.
  4. Pasa las patatas por un pasapurés o machácalas con un tenedor hasta obtener un puré fino y sin grumos. Es crucial evitar el uso de batidora‚ ya que podría liberar demasiado almidón y la masa resultante sería pegajosa.

2. Preparación de la Bechamel con Jamón

La bechamel es el corazón de la croqueta‚ y el jamón le aporta un sabor inigualable. Una bechamel bien hecha es cremosa‚ suave y sin grumos.

  1. Pica finamente la cebolla. En una sartén grande‚ derrite la mantequilla a fuego medio. Añade la cebolla picada y sofríe hasta que esté transparente‚ aproximadamente 5-7 minutos. Evita que se dore para que no amargue la bechamel.
  2. Añade la harina a la sartén y cocina durante 2-3 minutos‚ removiendo constantemente con una varilla. Este proceso‚ conocido como roux‚ es fundamental para que la bechamel no tenga sabor a harina cruda. La mezcla debe tomar un color ligeramente dorado.
  3. Comienza a añadir la leche caliente poco a poco‚ mientras sigues removiendo con la varilla. Es importante añadir la leche gradualmente para evitar la formación de grumos. Remueve constantemente hasta que la bechamel espese y tenga una consistencia cremosa. Esto puede tomar entre 10 y 15 minutos.
  4. Añade el jamón serrano en taquitos a la bechamel y remueve para que se distribuya uniformemente. Sazona con sal‚ pimienta negra recién molida y nuez moscada al gusto. Ten cuidado con la sal‚ ya que el jamón ya aporta un toque salado.

3. Mezcla y Enfriamiento de la Masa

La integración del puré de patata con la bechamel es clave para lograr la textura perfecta de la croqueta. Un enfriamiento adecuado es esencial para que la masa sea manejable.

  1. Añade el puré de patata a la sartén con la bechamel y el jamón. Remueve bien hasta que todos los ingredientes estén completamente integrados y la masa sea homogénea.
  2. Prueba la masa y rectifica de sal si es necesario. Recuerda que el sabor se intensificará al enfriarse.
  3. Extiende la masa en una fuente o bandeja previamente engrasada con un poco de mantequilla. Cúbrela con papel film‚ asegurándote de que el papel toque la superficie de la masa para evitar que se forme una costra.
  4. Deja enfriar la masa completamente en el frigorífico durante al menos 4 horas‚ o preferiblemente durante toda la noche. Este tiempo de enfriamiento es crucial para que la masa adquiera la consistencia adecuada para formar las croquetas.

4. Formado de las Croquetas

El formado de las croquetas requiere un poco de práctica‚ pero con paciencia se logra un resultado uniforme y atractivo.

  1. Saca la masa del frigorífico. Con la ayuda de dos cucharas o con las manos ligeramente enharinadas‚ toma porciones de masa y dales forma ovalada o redonda‚ según tu preferencia. Intenta que todas las croquetas tengan un tamaño similar para que se cocinen de manera uniforme.
  2. Bate los huevos en un plato hondo. En otro plato‚ coloca el pan rallado.
  3. Pasa cada croqueta primero por el huevo batido‚ asegurándote de que quede bien cubierta. Luego‚ pásala por el pan rallado‚ presionando ligeramente para que se adhiera bien. Repite este proceso (huevo y pan rallado) para obtener un rebozado más crujiente y resistente.
  4. Coloca las croquetas rebozadas en una bandeja y refrigéralas durante al menos 30 minutos antes de freírlas. Esto ayudará a que el rebozado se adhiera mejor y evitará que se deshagan al freír.

5. Fritura y Degustación

Una fritura adecuada es fundamental para obtener unas croquetas doradas y crujientes por fuera‚ y cremosas por dentro. La temperatura del aceite es crucial.

  1. En una sartén honda o freidora‚ calienta abundante aceite de oliva virgen extra a fuego medio-alto (aproximadamente 180°C). Es importante que el aceite esté caliente pero no humeando‚ para que las croquetas se cocinen correctamente por dentro sin quemarse por fuera.
  2. Fríe las croquetas en tandas pequeñas‚ para evitar que la temperatura del aceite baje demasiado. Cocina las croquetas hasta que estén doradas por todos los lados‚ aproximadamente 2-3 minutos por tanda.
  3. Retira las croquetas con una espumadera y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
  4. Sirve las croquetas de patata y jamón inmediatamente‚ acompañadas de tu salsa favorita (alioli‚ mayonesa‚ salsa brava) o simplemente solas. ¡Disfruta de este delicioso bocado casero!

Consejos y Trucos

  • Variedades de Patata: Utiliza patatas harinosas como la Kennebec o la Monalisa para obtener una masa más suave y cremosa.
  • Evitar Grumos en la Bechamel: Añade la leche caliente poco a poco y remueve constantemente con una varilla para evitar la formación de grumos.
  • Enfriamiento Adecuado: Un enfriamiento prolongado de la masa es crucial para que las croquetas sean fáciles de formar y no se deshagan al freír.
  • Rebozado Crujiente: Reboza las croquetas dos veces (huevo y pan rallado) para obtener un rebozado más crujiente y resistente.
  • Temperatura del Aceite: Mantén la temperatura del aceite constante durante la fritura para que las croquetas se cocinen de manera uniforme y no absorban demasiado aceite.
  • Congelación: Las croquetas se pueden congelar una vez rebozadas. Para freírlas‚ no es necesario descongelarlas previamente‚ simplemente añádelas directamente al aceite caliente.

Variantes de la Receta

Aunque la receta clásica de croquetas de patata y jamón es deliciosa por sí sola‚ puedes adaptarla a tus gustos y preferencias. Aquí te presento algunas variantes:

  • Croquetas de Pollo: Sustituye el jamón por pollo cocido desmenuzado.
  • Croquetas de Bacalao: Remoja y desala bacalao‚ desmenúzalo y añádelo a la bechamel.
  • Croquetas de Setas: Sofríe setas picadas y añádelas a la bechamel.
  • Croquetas de Queso: Añade queso rallado (manchego‚ parmesano‚ etc.) a la bechamel.
  • Croquetas Veganas: Utiliza leche vegetal (soja‚ almendras‚ etc.) y margarina vegetal en lugar de mantequilla. Sustituye el jamón por seitán o tofu ahumado.

Consideraciones Nutricionales

Las croquetas de patata y jamón son un plato energético y sabroso‚ pero es importante consumirlas con moderación debido a su contenido en grasas. La fritura añade calorías y grasas saturadas‚ por lo que es recomendable escurrirlas bien sobre papel absorbente después de freírlas.

La patata aporta hidratos de carbono‚ mientras que el jamón proporciona proteínas y grasas. La bechamel‚ elaborada con leche‚ aporta calcio y vitaminas. En general‚ las croquetas de patata y jamón pueden formar parte de una dieta equilibrada si se consumen ocasionalmente y se combinan con otros alimentos saludables.

Origen e Historia de las Croquetas

El origen de las croquetas se remonta a la corte francesa del siglo XVII‚ donde se servían como un plato elaborado para la nobleza. Se dice que el chef de Luis XIV‚ Antonin Carême‚ fue uno de los primeros en documentar la receta de las croquetas‚ aunque eran muy diferentes a las que conocemos hoy en día.

Las croquetas llegaron a España en el siglo XIX y rápidamente se popularizaron‚ convirtiéndose en un plato típico de la cocina española. La receta se adaptó a los ingredientes locales‚ y las croquetas de jamón se convirtieron en una de las variedades más apreciadas.

Hoy en día‚ las croquetas son un plato presente en la mayoría de los bares y restaurantes españoles‚ y también se preparan con frecuencia en los hogares. Son un bocado versátil y delicioso‚ que se adapta a diferentes ingredientes y gustos.

Conclusión

Las croquetas de patata y jamón son mucho más que un simple plato; son una tradición culinaria que se transmite de generación en generación. Con esta receta detallada y los consejos que te he proporcionado‚ podrás preparar unas croquetas caseras irresistibles que deleitarán a todos tus comensales. ¡Anímate a probar y disfruta de este clásico de la cocina española!

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