Los canelones de jamón y queso con bechamel son un plato clásico y reconfortante, perfecto para cualquier ocasión. Esta receta detallada te guiará paso a paso para que puedas prepararlos en casa con facilidad, obteniendo un resultado delicioso y cremoso. Desde la elección de los ingredientes hasta los trucos para una bechamel perfecta, aquí encontrarás todo lo que necesitas saber.

Ingredientes Necesarios

Para los Canelones:

  • 16 placas de canelones (precocidas o secas, según preferencia)
  • 250g de jamón cocido de buena calidad, picado finamente
  • 250g de queso rallado (mezcla de mozzarella, emmental o gruyere), reservando un poco para gratinar
  • 1 cebolla mediana, picada finamente
  • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • Sal y pimienta negra recién molida al gusto
  • Nuez moscada (opcional)

Para la Bechamel:

  • 50g de mantequilla sin sal
  • 50g de harina de trigo
  • 1 litro de leche entera (a temperatura ambiente)
  • Sal, pimienta blanca y nuez moscada al gusto

Para el Montaje y Gratinado:

  • Queso rallado adicional para gratinar (parmesano, grana padano, etc.)
  • Un poco de mantequilla para untar la fuente (opcional)

Preparación Paso a Paso

Paso 1: Preparación del Relleno

Comenzamos preparando el relleno, que es la clave del sabor de nuestros canelones. La calidad del jamón y el queso influirá directamente en el resultado final, así que elige ingredientes de buena calidad.

  1. En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio.
  2. Añade la cebolla picada y sofríe hasta que esté transparente y ligeramente dorada (aproximadamente 5-7 minutos). Remueve ocasionalmente para evitar que se queme. Una cebolla bien pochada aporta dulzor y profundidad de sabor al relleno.
  3. Incorpora el jamón cocido picado a la sartén y cocina durante unos 3-5 minutos, revolviendo para que se mezcle bien con la cebolla. No es necesario cocinarlo demasiado, solo calentarlo ligeramente.
  4. Retira la sartén del fuego y deja que la mezcla se enfríe un poco.
  5. En un bol grande, mezcla el jamón y la cebolla sofritos con el queso rallado. Sazona con sal, pimienta negra y una pizca de nuez moscada (si decides usarla). Prueba la mezcla y ajusta la sazón si es necesario. Recuerda que el jamón ya es salado, así que ten cuidado con la cantidad de sal que añades.

Paso 2: Preparación de la Bechamel

La bechamel es la salsa que le dará cremosidad y jugosidad a nuestros canelones. Es importante prepararla con cuidado para evitar que se formen grumos.

  1. En una cacerola mediana, derrite la mantequilla a fuego medio-bajo. Es importante que la mantequilla no se queme, ya que esto afectaría el sabor de la bechamel.
  2. Añade la harina a la mantequilla derretida y remueve constantemente con unas varillas (batidor de alambre) durante 2-3 minutos, formando lo que se conoce como "roux". El roux debe quedar suave y sin grumos. Cocinar la harina permite que pierda su sabor a crudo y que la bechamel tenga una textura más sedosa.
  3. Comienza a añadir la leche caliente poco a poco, sin dejar de remover con las varillas. Añade un poco de leche, remueve hasta que se integre completamente, y luego añade más leche. Continúa así hasta que hayas incorporado toda la leche. Añadir la leche gradualmente ayuda a evitar la formación de grumos.
  4. Sazona con sal, pimienta blanca y nuez moscada al gusto. Cocina a fuego bajo, removiendo constantemente, hasta que la bechamel espese y tenga una consistencia cremosa (aproximadamente 10-15 minutos). La bechamel estará lista cuando nape la cuchara (es decir, cuando la cubra con una capa fina y uniforme).
  5. Si aparecen grumos, puedes pasar la bechamel por un colador o utilizar una batidora de mano (de inmersión) para eliminar los grumos y obtener una salsa lisa y homogénea.

Paso 3: Rellenar los Canelones

Ahora vamos a rellenar las placas de canelones con la mezcla de jamón y queso. Si utilizas placas precocidas, sigue las instrucciones del fabricante para hidratarlas correctamente.

  1. Si utilizas placas de canelones secas, hiérvelas en agua con sal siguiendo las instrucciones del paquete. Normalmente, se cocinan durante unos minutos hasta que estén blandas pero firmes. Escúrrelas con cuidado y colócalas sobre un paño limpio para que se sequen un poco. Es importante que no se peguen entre sí.
  2. Extiende las placas de canelones sobre una superficie de trabajo limpia.
  3. Coloca una porción generosa del relleno de jamón y queso en el centro de cada placa.
  4. Enrolla cada placa con cuidado para formar el canelón.

Paso 4: Montaje y Gratinado

Finalmente, montamos los canelones en una fuente, los cubrimos con bechamel y los gratinamos en el horno.

  1. Precalienta el horno a 180°C (calor arriba y abajo);
  2. Unta una fuente apta para horno con un poco de mantequilla (opcional). Esto evitará que los canelones se peguen al fondo de la fuente.
  3. Vierte una capa fina de bechamel en el fondo de la fuente.
  4. Coloca los canelones rellenos en la fuente, uno al lado del otro.
  5. Cubre los canelones con el resto de la bechamel, asegurándote de que queden bien cubiertos.
  6. Espolvorea queso rallado adicional por encima de la bechamel. La cantidad de queso dependerá de tu gusto personal.
  7. Hornea durante 20-25 minutos, o hasta que el queso esté dorado y burbujeante. Vigila los canelones durante la cocción para evitar que se quemen.

Paso 5: Servir

Retira los canelones del horno y déjalos reposar durante unos minutos antes de servir. Esto permitirá que los sabores se asienten y que la bechamel se espese un poco.

Sirve los canelones calientes, solos o acompañados de una ensalada fresca. También puedes añadir un poco de perejil fresco picado por encima para decorar.

Consejos y Variaciones

  • Variaciones del Relleno: Puedes añadir otros ingredientes al relleno, como champiñones salteados, espinacas cocidas, pollo desmenuzado o carne picada.
  • Salsa de Tomate: Para un sabor más intenso, puedes añadir una capa de salsa de tomate casera o comprada entre la bechamel y los canelones.
  • Canelones Vegetarianos: Para una versión vegetariana, puedes rellenar los canelones con verduras salteadas (calabacín, berenjena, pimiento, etc.) y queso ricotta.
  • Placas de Canelones Frescas: Si utilizas placas de canelones frescas, no es necesario hervirlas previamente. Simplemente rellénalas y hornéalas directamente.
  • Preparación con Antelación: Puedes preparar los canelones con antelación y guardarlos en el refrigerador hasta el momento de hornearlos. En este caso, añade un poco más de bechamel antes de hornearlos, ya que las placas pueden absorber parte de la salsa durante el reposo.
  • Congelación: Los canelones también se pueden congelar. Una vez montados y cubiertos con bechamel, envuélvelos bien en papel film y congélalos. Para hornearlos, descongélalos en el refrigerador durante la noche y hornéalos como se indica en la receta.
  • La importancia de la calidad del queso: Utilizar una buena mezcla de quesos realza significativamente el sabor. Un queso curado rallado, como el manchego o el parmesano, aporta un toque extra de sabor al gratinado.

Bechamel Perfecta: Evitando Errores Comunes

La bechamel es una salsa fundamental en esta receta, y lograr una textura perfecta es crucial. Aquí te damos algunos consejos para evitar los errores más comunes:

  • Proporciones Correctas: Respetar las proporciones de mantequilla, harina y leche es fundamental. Demasiada harina resultará en una bechamel espesa y pastosa, mientras que demasiada leche la hará líquida.
  • Temperatura de la Leche: Utilizar leche a temperatura ambiente facilita la disolución de la harina y reduce el riesgo de grumos.
  • Remover Constantemente: Remover la bechamel constantemente, especialmente durante los primeros minutos de cocción, es esencial para evitar que se formen grumos. Utiliza unas varillas (batidor de alambre) para asegurarte de que no queden restos de harina pegados al fondo de la cacerola.
  • Fuego Bajo: Cocinar la bechamel a fuego bajo permite que la harina se cocine completamente y que la salsa espese de forma gradual y uniforme.
  • Solución para Grumos: Si a pesar de todo aparecen grumos, no te preocupes. Puedes pasar la bechamel por un colador o utilizar una batidora de mano (de inmersión) para eliminarlos. También puedes añadir un poco más de leche caliente y remover vigorosamente.

Consideraciones Nutricionales y Saludables

Si bien los canelones de jamón y queso con bechamel son un plato delicioso y reconfortante, es importante tener en cuenta algunas consideraciones nutricionales y saludables:

  • Calorías y Grasas: Los canelones son un plato relativamente alto en calorías y grasas, debido al jamón, el queso y la bechamel. Si estás cuidando tu peso o tienes problemas de colesterol, modera el tamaño de las porciones y utiliza ingredientes bajos en grasa.
  • Sodio: El jamón cocido y algunos quesos pueden ser altos en sodio. Si tienes problemas de presión arterial alta, elige jamón bajo en sodio y quesos con menos sal.
  • Alternativas Más Saludables: Para una versión más saludable, puedes utilizar leche descremada o vegetal para la bechamel, jamón de pavo en lugar de jamón cocido, y queso ricotta en lugar de quesos más grasos. También puedes añadir más verduras al relleno para aumentar el contenido de fibra.
  • Control de Porciones: Como con cualquier plato rico en calorías, el control de porciones es clave. Una porción moderada de canelones puede ser parte de una dieta equilibrada.
  • Maridaje: Acompaña los canelones con una ensalada fresca y ligera para equilibrar la comida.

Conclusión

Los canelones de jamón y queso con bechamel son un plato versátil y delicioso que se adapta a diferentes gustos y ocasiones. Con esta receta detallada y los consejos que te hemos dado, podrás prepararlos en casa con facilidad y sorprender a tus familiares y amigos. ¡Anímate a probar esta receta y disfruta de un clásico de la cocina!

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